ArdEdu: galería escolar

A partir de procesos educativos para la básica y la media, del módulo del Componente de Educación Artística y Cultural y del Modelo de Enfoque por Derechos —con una especial mirada sobre el derecho al arte y la cultura—, he tejido, experiencias diferenciadas para potenciar la cultura escolar, la vida comunitaria y lenguajes de infancias y juventudes. Estas experiencias visibilizan y valoran saberes, procesos y prácticas promovidos en instituciones escolares del sector público donde se ha compartido mi trabajo profesional, asumiendo la escuela como territorio cultural y espacio para potenciar la fortaleza de la participación joven, la apropiación del arte y la celebración de convenios de convivencia social.

En este contexto surge la iniciativa pedagógica CREWS_EDU: Escuelas de Proyectos, un proyecto continuo que ha fomentado el liderazgo juvenil a través de propuestas como pintura mural y la galería escolar para la circulación artística en el territorio y apropiación cultural de jóvenes o crews. La vitrina institucional y con ciclos de exhibición en el 2025 con el nombre ArdEdu: consolido muestras artísticas de proceso y obras de estudiantes jóvenes, en tres ciclos del año escolar, impulsando la creatividad como motor para la innovación pedagógica.

Ciclo 1: Colegios que fluyan/ influyan

Con el acompañamiento del colectivo Distrito Crew, se pintaron murales que intervinieron las paredes del colegio, consolidando la idea de una galería escolar viva. Entre los diseños realizados se representaron la fauna y la flora que habitan la institución, resaltando el potencial de sus plantas, flores, insectos y aves como un tejido que da vida al entorno. De manera complementaria, se desarrolló una muestra de 28 lienzos, cada uno representando los 28 proyectos institucionales liderados por los maestros, quienes intervinieron directamente las piezas como articuladores de experiencias pedagógicas y prácticas de aula cargadas de saberes y sentido. Este proceso configuró un circuito y un ambiente de relaciones, conversaciones y diálogos que ponen en primer plano la vida, el cuidado y la preservación de lo humano, resignificando las paredes, los edificios y los recursos escolares más allá de las normas rígidas y las estructuras institucionales.

2. 80 estilos artisticos. Darle la vuela al mundo

La experiencia “Dar la vuelta al mundo, hablemos arte” reunió 80 estudios artísticos creados por jóvenes, cada uno inspirado en un estilo distinto, configurando un recorrido transmedial por la historia y la diversidad cultural del arte. Los estudiantes exploraron desde estilos tradicionales y vanguardistas hasta lenguajes contemporáneos como la animación, los videojuegos, el cine o la publicidad. Al mismo tiempo, se abrió la reflexión hacia los pueblos originarios y las culturas indígenas, que enriquecieron el horizonte de referencias y permitieron reconocer la multiplicidad de formas de creación. Así, los 80 estilos se convirtieron en un mapa que conectaba la historia del arte con las prácticas juveniles y con los tejidos culturales que sostienen la memoria artística de diferentes comunidades.

Más que reproducir técnicas o repetir fórmulas estéticas, esta iniciativa permitió que los jóvenes se asumieran como productores de narrativas propias, capaces de poner en circulación saberes nuevos a través del arte. Cada uno de los 80 lienzos se unificó bajo un mismo eje narrativo: la representación de un animal, cuya técnica, composición y sentido quedaban abiertos a la interpretación personal. De esta manera, los estudiantes no solo investigaron y experimentaron con estilos artísticos, sino que también construyeron relatos visuales cargados de subjetividad, sensibilidad e identidad. El resultado fue un circuito de obras que reflejaba la diversidad de miradas juveniles sobre el arte y sobre el mundo, demostrando que la escuela puede ser un lugar donde se amplifican las voces y las formas de habitar lo sensible.

3. bloque cultural

   
   

El Bloque Cultural, Bloque Joven, Bloque Cultura y Conexión surge como un espacio de apropiación en la escuela, a partir de la transformación de una estructura antigua (40x40) que permanecía subutilizado y destinado al almacenamiento de materiales. Este lugar fue resignificado para convertirse en un escenario de creación y experimentación, dando vida a tres espacios articulados: el Laboratorio de Artes Vivas, el Laboratorio de Artes Plásticas y Visuales y el Laboratorio de Medios y Artes Mediales. Estos laboratorios no solo responden a disciplinas específicas, sino que abren la posibilidad de comprender el arte como una práctica expandida, en donde el cuerpo, la imagen, el gesto y la experimentación se cruzan en un mismo territorio.

En estos espacios se integran formas diversas de expresión: desde la danza y el teatro, hasta la fotografía, el cine, la animación y los juegos simbólicos con la imagen. La configuración del bloque fue un proceso colectivo que incluyó la adecuación, limpieza y pintura del lugar junto con el Distrito Crew de Jóvenes, quienes intervinieron el espacio con murales, programaron diseños y acompañaron la construcción de exposiciones. De esta manera, lo que antes era un lugar en desuso se transformó en un territorio de arte y cultura dentro de la escuela, un nodo de convergencia para la creación, el diálogo y la producción simbólica que potencia la vida comunitaria y juvenil.

La propuesta Galería Escolar ArdEDU en el Colegio se plantea como una iniciativa que adecúa los espacios físicos del edificio central y los pasillos, para poner en el centro de lo común la discusión sobre el patrimonio, lo propio, los valores institucionales y sus riquezas.